Este Es, hasta ahora, uno de los mejores cuentos que leí sobre sexualidad, nacimiento y familias.
Porque este es un tema que si se habla... que necesita hablarse. Porque los chicos naturalmente tienen inquietudes, y si estamos atentos, las preguntan de diferente manera, hay quienes preguntan directamente, hay quienes actúan. La sexualidad infantil existe, decía Freud, claro no con la connotación adulta. Pero ellos tienen inquietudes.
Este cuento nos proporciona una sólida manera de abordar estos temas. Y al final... una orientación a padres.. tan necesaria!
Recomiendo que lo lean entero primero los adultos, la orientación del final nos da mas herramientas a la hora de leerles a los chicos. Se puede cambiar alguna palabra si no estamos de acuerdo. Cada familia es única y decide que mensaje da.
Lo que si está claro... Es que algo hay que decir.
La información hoy en día circula con mucha fluidez por todos lados. ¡Qué mejor que se enteren primero por nosotros y con la información que nosotros decidamos dar!