Ramón vivía preocupado, asustado, angustiado... pobre, no podía disfrutar nada por sus preocupaciones. Sus papas le hablaban, pero no lograban aliviarlo. Hasta que su abuela le contó una hermosa tradición de Guatemala... los muñequitos quitapenas.
Ramón encontró en ellos alivio... una herramienta externa puede ayudar a los niños con sus temores y como ésta puede haber muchas otras ideas para ayudar a los más pequeños.
Una invitación a hablar de nuestras preocupaciones y a buscar estrategias con nuestros niños, que como a Ramón, los pueden aliviar mucho.